martes, febrero 05, 2008

¡Gracias!


Resulta que tenía que aparecer un médico, médica, para ser más exacta, fanática de los tacones, para que por fin alguien saliera en defensa de ese accesorio de la moda que en realidad es bien protagonista: los zapatos.
A esta donna se le ocurrió demostrar, mediante estudio de campo, que el uso de tacones, específicamente del taco aguja, reporta ciertos beneficios a la anatomía femenina y lo plantea de tal manera que dudo que las mujeres de la segunda cuarentena de la vida se resistan a usarlos.
Ahora bien, mis reflexiones personales van por el lado de que las mujeres más jóvenes difícilmente se dejarán convencer de subirse a estos nunca bien poderados calzados, que exigen una cuota no menor de sacrificio, para averiguar si los efectos anunciados por la italiana son ciertos.
En cambio, las de más de cuarenta, ya estamos más acostumbradas a los tacos, los usamos incluso cuando éramos adolscentes, en la época de la horrorosa moda ochentera (de ese tiempo son mis primeros zapatos de charol de taco aguja...). Entonces, la gracia radica en que estamos más acostumbradas, nos causan menos tormento, los lucimos con más gracia ¡y las piernas se nos ven mucho más lindas!

2 comentarios:

Mexxe dijo...

No puedo creerlo!!

CAROLINA MENESES COLUMBIÉ dijo...

Hola amiga, qué alegría me dio ver tu mensaje en mi blog. ¿Cómo has estado? ¡Tenemos que juntarnos!
En cuanto al taco aguja, no gracias, todavía no puedo descubrir el secreto del equilibro cuando lo uso.

Un grandísimo abrazo.